Estas navidades, el mejor regalo eres tú.

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domingo, 20 de mayo de 2012

El destino elevado al infinito, hará o deshará lo que quiero vivir a tu lado.


El destino, honorable destino. Tú que quisiste que todo fuese como es; tú que me diste sonrisas y malos momentos; tú que controlas mi vida a tu gusto. Hecho de menos su tacto, su sonrisa, su todo. Y solo te pido eso, que en tu larga cronología de mi vida, aparezca. Y ya por pedir, que me bese, que me diga te quiero, que de la mano caminemos, nos regalemos sonrisas y compartamos lágrimas. Quiero que...sí, sea para mí, solo para mí.
Y en este tan fantástico cuento que te pido, quiero que me lleves al infinito. Tiene que ser un viaje alucinante, vivir cada estrella, sentir todo elevado al infinito, besas por infinito, decir infinitas palabras, y ya que estamos, vivir por la infinidad a su lado. Y al terminar el viaje, quiero...que me abrace y me susurre "volveremos, juntos". Y entonces, volvamos a la vida, y despertemos del mutuo sueño en una cama compartida.
No quiero que solo sea una persona a la que conocí, no lo quiero. Conocí, me encantó, me enamoré, le besé, y quise vivir y compartir mi vida. Así quiero que pase; pero claro, no todo lo que deseamos está en mis manos. Por eso, si en algún lugar te encuentras, si es verdad que todo tiene que ver contigo, por favor, te pido que me encuentre, que viva y que sienta a mi lado. Solo te pido eso. Eso y que ahora me vuelva, le vea y le diga "¿que estás haciendo aquí?" y con una sonrisa, me responda: "encontrarte".

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